Khalil al-Hayya, Benjamín Netanyahu, Donald Trump y Volodímir Zelenski.. Ilustración Erick Trujillo
EL NUEVO DIARIO, REDACCIÓN DIGITAL. – Mientras los frentes de batalla siguen activos y la diplomacia intenta abrirse paso, los conflictos entre Rusia y Ucrania y entre Israel y Gaza continúan definiendo el rumbo de la seguridad internacional. En ambos escenarios, 2025 cerró con negociaciones avanzadas, treguas parciales y encuentros de alto nivel que estuvieron cerca de cambiar el curso de las guerras, pero sin lograr aún una paz definitiva.
Rusia y Ucrania: una guerra estancada, pero con negociaciones en marcha
La guerra entre Rusia y Ucrania, iniciada en febrero de 2022, entró en una fase de desgaste prolongado. Aunque los combates no han cesado por completo, el conflicto ha evolucionado hacia un escenario donde la presión militar convive con una intensa actividad diplomática.
Durante el último año, Rusia consolidó posiciones en el este y sur de Ucrania, mientras Kiev mantuvo su resistencia con apoyo militar y financiero de aliados occidentales. Sin embargo, el agotamiento del conflicto y el impacto económico global aceleraron los contactos políticos.
Uno de los momentos más relevantes se produjo recientemente, cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sostuvo un encuentro clave con el mandatario ucraniano, Volodímir Zelenski. La reunión culminó dejando sobre la mesa un plan de paz que, según ambas partes, se encuentra “avanzado en más de un 90 %”, aunque sin un acuerdo definitivo.
Lo que está en negociación en el conflicto ruso-ucraniano
Entre los puntos aún sin consenso figuran:
- El estatus de los territorios ocupados por Rusia.
- Las garantías de seguridad para Ucrania.
- El futuro vínculo de Kiev con la OTAN.
- Las condiciones de un alto el fuego permanente.
Aunque el acercamiento diplomático ha reducido el riesgo de una escalada mayor, Moscú insiste en que cualquier acuerdo debe reconocer sus exigencias estratégicas, mientras Ucrania mantiene su reclamo de soberanía territorial.
Tregua frágil tras meses de devastación entre Israel y Gaza
El conflicto entre Israel y Hamas en la Franja de Gaza dejó una de las crisis humanitarias más graves de los últimos años. Tras meses de intensos bombardeos y enfrentamientos, a inicios de 2025 se logró un alto el fuego mediado por Estados Unidos, Egipto y Qatar.
El acuerdo permitió el intercambio de rehenes y prisioneros, así como una reducción significativa de las hostilidades. Posteriormente, se avanzó en un plan de paz respaldado por la comunidad internacional, con el objetivo de estabilizar la zona y abrir un proceso de reconstrucción.
Paz incompleta y negociaciones inconclusas
Pese a los avances, la tregua en Gaza sigue siendo frágil. Las diferencias sobre la desmilitarización de Hamas, la gobernanza futura del territorio y el acceso humanitario han frenado la implementación total del acuerdo.
Israel ha reiterado que no aceptará un escenario en el que Hamas conserve capacidad militar, mientras organismos internacionales advierten que la crisis humanitaria persiste, incluso con el cese parcial de las hostilidades.
Un mundo en pausa, entre la guerra y el acuerdo
Los conflictos en Ucrania y Gaza evidencian un patrón común: la comunidad internacional ha logrado evitar una escalada mayor, pero aún no consigue cerrar acuerdos de paz definitivos. Los encuentros diplomáticos, como el reciente diálogo entre Trump y Zelenski, muestran que la vía política sigue abierta, aunque llena de obstáculos.
Mientras tanto, el mundo permanece en una tensa espera, con guerras que no terminan de apagarse y negociaciones que avanzan lentamente, marcando un equilibrio frágil entre la confrontación y la esperanza de paz.
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